La vida de una persona en la Edad Media dependía en gran medida de la clase a la que pertenecía: campesino, terrateniente, pequeño señor feudal, caballero, conde o incluso rey. Por eso esta era abarca tantos géneros.
Sin embargo, los juegos de mundo abierto suelen seguir las aventuras de caballeros o guerreros que viajan con frecuencia y no están atados a sus asignaciones.