En el juego Dragon's Dogma 2, los compañeros se llaman peones, y están creados para simplificar y diversificar la jugabilidad. Con el escuadrón adecuado, los peones ayudarán a derrotar a la mayoría de los enemigos, encontrar recursos raros y conseguir numerosos consumibles. Aunque su influencia puede ser mínima al principio del juego, a partir de la mitad de la aventura, entender las fortalezas de tus compañeros es esencial para evitar quedarte atascado en una ubicación. En esta guía, hablaremos sobre las mejores clases y rasgos de los peones para que puedas armar el equipo perfecto.
Hay un total de 6 clases, cada una con su comportamiento único y estilo de combate, que deben ser elegidas de acuerdo a tus preferencias.
La especialización es un parámetro especial que otorga a un compañero un nuevo rasgo de comportamiento. No hay una especialización universal, y la mayoría causará problemas o te decepcionará en el momento más crítico. Por lo tanto, este es uno de los puntos importantes a considerar al elegir un nuevo peón.
Para desbloquear una especialización, necesitas interactuar con el peón y demostrar tu actitud hacia los demás a través de diálogos y acciones. Con el tiempo, el compañero desarrollará un nuevo rasgo que influirá en su comportamiento en combate y diálogos.
Para cambiar el carácter de un peón, necesitarás un objeto llamado Incienso de Rima Misteriosa. Este recurso raro se puede encontrar en el mundo de Dragon's Dogma 2 o se puede comprar con moneda real.
La tarea de los guerreros es liderar la carga y causar un daño masivo en combate cuerpo a cuerpo. La directividad revelará a este guerrero, aunque puede reducir la precisión de los golpes. Tal peón será un compañero fiable para los jugadores que les gusta luchar en la primera línea.
Si prefieres una clase más segura, como un arquero o un mago, te recomendamos llevar a un guerrero de buen corazón en tu equipo. A diferencia de la primera opción, se centra en proteger a los aliados y no te dejará solo.
Elige el mejor rasgo dependiendo de lo que falte en el campo de batalla:
No es la clase más duradera, que necesita evitar daño adicional. Un arquero con rasgos de Imperturbabilidad o Bondad a menudo se expondrá a ataques. La mejor opción es Franqueza, que ayuda a evaluar la situación de manera sobria, causar un daño significativo desde la distancia y retirarse cuando sea necesario.
El ladrón es un personaje frágil de combate cuerpo a cuerpo, por lo que Franqueza es esencial para ellos ante todo. Directividad y Bondad hacen que el peón sea inútil en batalla, no recomendado para tales ladrones. Serán los primeros en entrar en combate y, lo más probable, morirán sin esperar a los aliados.
Cada rasgo tendrá su desventaja, lo que solo reducirá el potencial de combate del guerrero. Un personaje Imperturbable es óptimo para esta clase. No verás nada excepcional, pero tal luchador es predecible, lo que simplifica la estrategia en el campo de batalla.
La tarea principal de los hechiceros es causar daño constante. Elegir un peón Bondadoso podría arriesgar la pérdida de la batalla, ya que se distraerán con el entorno. Un hechicero se despliega por completo con el rasgo de Imperturbabilidad, permitiendo causar daño crítico.
Tener varias clases está diseñado para que puedas construir un equipo equilibrado, independientemente de tu héroe principal. Dependiendo de tus preferencias, puedes seleccionar peones adecuados: