The Last Stand: Aftermath es un juego de acción post-apocalíptico con elementos roguelike y una vista de cámara isométrica. El juego se desarrolla en un mundo en el que la humanidad se ha visto envuelta por una epidemia de zombis. El personaje principal también está infectado y, por tanto, no puede evitar la muerte. Cuando un superviviente muere, podrás jugar como otro personaje y conservar todos los beneficios desbloqueados anteriormente. Así, en el juego jugarás como varios supervivientes durante el trayecto. El juego presenta la creación de elementos y armas, así como la capacidad de usar varias mutaciones que pueden darle al personaje nuevas habilidades, pero al mismo tiempo pueden convertirlo por completo en un no-muerto.