Ni siquiera conviene comentar sobre este juego. En esencia, esto no es un juego, no hay nadie con quien jugar o contra quién, es un simulador de carrera.
Gráficos que te arrancan los ojos (en ultra)), sonidos que provocan ataques epilépticos, cuya trama no lo es. Si eres masoquista y te gusta sufrir, compra inmediatamente este juego por dinero y disfrútalo.
Sólo la presencia de cartas salva el juego del cero total, le daré un punto por esto, 1/10.