Una cosa espeluznante con un montón de gritones, para decirlo muy brevemente. Y ahora con más detalle: el lugar de los acontecimientos es realmente muy oscuro, que es lo que se esperaría de un hospital psiquiátrico olvidado tanto por Dios como por los demonios. El acompañamiento musical está al más alto nivel, porque no sabes lo que te espera detrás de la puerta, y luego los chirridos de la música son molestos o la música en sí es tremendamente lúgubre. Hay muchas sorpresas, además de que también hay que pensar en cómo encontrar la llave/abrir la puerta, etc., es decir, completar la tarea principal. Es cierto que cuanto más te acercas al final, más fácil será ocultar y calcular los guiones enemigos, pero esta es una opinión muy subjetiva. Esto no le sucede a todo el mundo, porque puedes sumergirte tanto en el juego que es difícil incluso correr hacia el juego... Da miedo salir a la cocina a buscar agua por la noche. ;)