Una mezcla de varios géneros, en la que el jugador controla una pelota de golf en un mundo generado procedimentalmente e intenta meterla en el hoyo antes que los demás. La baraja de cartas ensamblada ayuda no solo a cambiar el estilo y el poder de los ataques, sino también a influir en el juego. Los usuarios ganan puntos y compiten entre sí en una tabla de clasificación.