«Una secuela triunfante»: los críticos alaban Kingdom Come: Deliverance 2

Con un colosal mundo abierto repleto de más de 100 horas de contenido atractivo, un combate sustancialmente mejorado en comparación con el KCD original, y más, Kingdom Come: Deliverance 2 es un triunfo innegable de Warhorse Studios. Es uno de los mejores RPG que he jugado, y sin duda estará en la conversación para el Juego del Año 2025.

Es un esfuerzo duro y frustrante a veces, pero que aún tiene sus momentos en los que sorprende y deleita en silencio. Al igual que el original, este no es un RPG diseñado para hacerte sentir bien — sigues siendo poco más que un pasajero en este tapiz histórico, siguiendo detrás de las colas de caballo de los superiores de Henry, y limpiando el desorden que dejan atrás. Algunos disfrutarán de ese trabajo, pero yo, por mi parte, no estaré ansioso por otra secuela en el corto plazo.

Es obvio que se ha vertido mucho amor en cada faceta de Kingdom Come: Deliverance 2. Si encontraste el combate en el primer juego demasiado difícil o las mecánicas de supervivencia tediosas, entonces la jugabilidad simplificada de la secuela puede que no sea suficiente para cambiar tu opinión. Sin embargo, si eras fan del primer juego, hay mucho que disfrutar aquí. Es claramente el juego que Warhorse quería hacer en 2018, y ha mejorado de tantas pequeñas maneras.

KCD2 se siente un poco milagroso: una cosa ridículamente ambiciosa y peculiar que de alguna manera cumple con su ambición y peculiaridad, logrando alcanzar los altos que Warhorse apuntaba en el primer juego, pero que quizás se quedó un poco corto.