Muy malo. No esperaba que un juego infantil envejeciera tan mal. El diseño artístico es mediocre, el diseño de sonido es una tontería, las ubicaciones son marrones y monótonas, la trama... la trama está ahí sólo como fondo. Pero lo que más me sorprendió del juego fue la mecánica de disparo. Ella es terrible. No hay impacto al golpear al enemigo, el arma se siente igual y el disparo es simplemente muy tosco, aburrido y poco interesante. Tampoco ayuda que el juego tenga cuatro personajes jugables que difieren en sus características, porque a la mitad el juego se vuelve aburrido. Lo único que realmente agrada, especialmente para los estándares actuales, es la presencia de esa misma "moralidad gris" en el juego y el diseño elegante y memorable del Helghast.